4 may 2011

Adiós, Sevilla.

Pensábamos que nos quedaríamos una larga temporada viviendo en Sevilla... pero como dicen aquí, va'se que no. Eso del trabjo resultó no ser tan serio, así que ni modo... muy a nuestro pesar, esto se acaba aquí. De Sevilla, nos vamos mañana. De España, pasado mañana. Mi querido Rubén, habrá que prender ese carbón y poner a enfriar esa cheve...

Mientras tanto, queda lo último de Sevilla. Justo ahora es la Feria de Abril (en mayo! Sevilla es genial, todo es posible aquí) y la calle está inundada de sevillanas camino a la feria. La feria en sí es un recinto enorme al aire libre lleno de carpas con comida, bebida y música. Lo malo para nosotros es que la mayoría, las buenas, son privadas y sólo puedes entrar si alguien te invita, y esta vez no tuvimos suerte. Aún así, nos dimos una vuelta y nos apantallamos viendo esta tradición llena de música, alegría y sevillanas preciosas.


Así las ves a todas, por la calle, y les encanta que les tomen fotos.








Todas van a la feria, el evento más esperado del año.




Ya en la feria...




























Además de bailar, lo que se acostumbra es comer pescaito frito y tomar rebujito, que es una mezcla de un licor llamado manzanilla y refresco de limón. Es de esos tragos dulces que no sientes hasta que se te mueve el piso.












Varios rebujitos después.


Mientras tanto, afuera.


¡Están por toda la ciudad!


A esta sevillana adoptada le regaló un abaniquito nuestra comadre Natasha, y olé.


En el cine, a la función de media noche se le llama sesión golfa.




Guadalquivir.


La puerta principal de la Catedral.


Éste es el edificio del ayuntamiento. Aunque no se aprecia del todo en la foto, el lado izquierdo está cargadísimo de adornos en el mármol tallado; el lado derecho está liso, liso... es que se les acabó el presupuesto, y lo dejaron así. ¡Sevilla es genial!










En Sevilla, la ley de la gravedad es opcional.




En una calle de la judería. La historia va así: los cristianos atacaron a los judíos que vivían ahí y mataron a miles. Los judíos planearon un ataque como respuesta, pero Susana, la hija del jefe de éstos, estaba enamorada de un soldado cristiano y le confesó los planes de su padre. El soldado, que no estaba tan enamorado como ella, los comunicó a sus superiores y emboscaron a los judíos, matando miles más, incluyendo a la familia de Susana. Ella tuvo que convertirse al cristianismo y se hizo monja, pero en su muerte pidió que le cortaran la cabeza y la exhibieran en esta ventana de su antigua casa como recordatorio de lo que había hecho.




Cruces verdes.


En esta plaza se hicieron autos de fe durante la inquisición (auto de fe es la manera elegante de decir "quemar judíos en la hoguera").


Y dijo: dadme un cono, con 12 bolas.


4 comentarios:

  1. Ya dijo pelao! avisen cuando anden por acá para armar algo!

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  2. sacamos tambien el foco morado?

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  3. mariana y aron! espero me recuerden soy andrea nos conocimos en sevilla en el hostal en semana santa iba con una amiga, montse!por lo que veo estan de vuelta en méxico como nosotras, ojala algun día nos volvamos a encontrar, mientras tanto tienen una casa en guadalajara, un beso!

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  4. Hola Andrea, sí que las recordamos, justo ahora yo (Mariana) estoy trabajando en el festival de cine de Gdl, a ver si nos tomamos un café, te dejo mi mail: marianafm@gmail.com. Un abrazo!

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