2 jul 2010

Sexo, droga y bicicletas en Amsterdam

ADVERTENCIA: EL SIGUIENTE TEXTO CONTIENE HISTORIAS SOBRE DROGAS Y SEXO EXPLÍCITO

Amsterdam nos recibió una tarde de lunes con su ambiente relajado y mucho calor. Como todos saben, comprar y fumar mota no es ilegal en esta ciudad y la gente lo hace todo el tiempo y en todos lados. Aunque prácticamente sólo puedes hacerlo en las coffeshops, la policía es muy laxa al respecto.

Nos hospedamos en el Hostal Centraal, que de central nomás tiene el nombre, ya que está bastante alejado del centro. Tuvimos una experiencia agridulce con la comunidad local de couchsurfing: después de varias decenas de peticiones, recibimos un par de negativas, los demás no se dignaron siquiera en contestar.
Nos da la impresión de que la alta demanda de hospedaje (sobre todo siendo verano) ha convertido a los couchsurfers locales en una comunidad un tanto egocéntrica y exigente: Si quieres que te hospeden, además de hacer tu petición con mucha anticipación debes elogiarlos y explicarles a detalle cómo crees que surfear su sillón hará mejor tu experiencia (¿?). Como dice nuestro buen amigo Anders, la gente debe agarrar la onda de que viajas a un lugar para conocerlo, no para conocerlos a ellos, pero al parecer aquí les hace falta una dosis de ubicatex, y eso lo comprobamos en la reunión semanal a la que asistimos un sábado. Tal vez sean demasiado mamones, tal vez sólo tuvimos mala suerte...

Por otro lado, una pareja de húngaros, Zoli y Moni, nos prestó su sillón por un fin de semana y la experiencia fue increíble, no sólo nos hicieron sentir en casa, también nos cocinaron un plato típico de Hungría que es una especia de souflé de papa con chorizo, crema agria, queso y huevo cocido. Estaba buenísimo.

Al caer la noche, el Red Light District –distrito rojo en spanish- es un mercado de pecado para turistas. O un Disneylandia para adultos (y chavos de 18 años y un día). Un par de calles largas con bares, coffeeshops vendiendo mota, las famosísimas prostitutas en vitrinas (de a 50 euros el servicio) y espectáculos de strippers y sexo en vivo.

Lo curioso es que es una atracción turística a tal punto que casi se siente como una especie de parque temático. Turistas en shorts y chanclas tomándose fotos, chavos medio pachecos echando relajo, grupos de señoras parloteando… creo que hasta familias. Todo eso entre neón rojo y chicas con poca ropa haciéndote señas para que te acerques a preguntar, ¿de a cómo?

Los shows para adultos le tiran más a lo divertido que a lo erótico. En el Mouline Rouge la dinámica fue la siguiente: Primero, entramos con el bonche de turistas -grupos de chavas, parejas (maduritas o jóvenes y bellas como nosotros), obviamente los chavos que van al desmadre y uno que otro hombre solo-.
El programa consta de varios números de striptease, con unas mujeres más bien maduras, que están como pendiendo del último hilito de juventud que les queda. La primera nos bailó. Bajó del escenario y contoneó su pechonalidad frente a mi cara, acto seguido volteó y le dio un tetazo en la cara a Aron, ¡zas!, knock out. Luego bañó a todo el público con leche materna, algo que me pareció cero sexy, aunque a algunos pareció gustarles, en fin, cada quien sus perversiones o diversiones, whatever.

Había dos chavitos pubertos en el público que parecían Beavis y Butthead, y que terminaron siendo los patiños de todas las bailarinas. La gracia de la segunda chica era que escondía como 30 metros de listón que fue removido de salva sea la parte por “Beavis”, uno de los pubertos.

La tercera salió y engrasó el tubo para su baile, pero se le pasó la mano y al dar vueltas se cayó de cabeza en el suelo y se incorporó rápidamente ante la mirada atónita de todos, que pensamos que se había desnucado, qué susto. Luego pasó a Beavis (sí, otra vez) al escenario, le quitó la camisa, le hizo un bailecito, y le escribió en el pecho la palabra sexy con un plumón. La gracia fue la parte del cuerpo con la que lo hizo.

Nuestra siguiente bailarina se aventó un numerito con un plátano y pasó a varios chavos al escenario, incluido Aron. Todos tuvieron que acabar el plátano a mordidas, adivinen en qué parte se lo puso. Y para finalizar, un show de sexo en vivo, que fue lo menos divertido de todo, de verdad. Los protagonistas podían haber estado bordando y hubiera dado lo mismo, así de deschistados estaban. Cero actuación. Trampa para turistas, si deciden ir, ya saben más o menos qué les espera.

Pasamos toda una tarde relajadísimos en Vondelpark, una de las áreas verdes más grandes de la ciudad, donde puedes ver patos, gansos y uno que otro perro nadando en el lago.

Amsterdam también cuenta con varios museos destacados, el Van Gogh, concurridísimo y muy completo; la casa de Ana Frank, donde puedes recorrer las habitaciones en las que Ana y su familia se escondieron de los nazis durante dos años, además de ver su diario original; el museo de Fotografía (FOAM); y el Museo del Sexo, interesantísimo.

Algo que nos ha encantado hacer, además de recorrer toda la ciudad a pie, ha sido sentarnos a la orilla de algún canal e improvisar un picnic. Un día nos reunimos con Sarah, una chica que conocimos en Bruselas y que por ahora trabaja en un hostal en Amsterdam. En la calle nos encontramos a uno de sus huéspedes, Angelous, un chavo de Grecia. Pasamos un buen rato viendo el tiempo y los botes pasar desde la orilla.
Y seguimos aquí. Esta historia en Amsterdam continuará…




En varias tiendas (y en el mercado de flores) puedes copmprar semillas para que cultives tu matita en casa. ¡Nada como lo hecho en casa!


Ooh, las flores. (Son de madera. Actualmente no es temporada de tulipanes.)


Mmm, queso.


El mercado de flores.


En algunas tiendas, también venden hongos mágicos.


El Bulldog, una de las coffeeshops del distrito rojo.


En Amsterdam ves mucha gente así, relajándose en sus ventanas, viendo a la gente pasar. También ves muchos gatos en ventanas. A veces, los ves juntos.


Éste es un muffin de mota. No lo comimos. En la coffeshop Abraxas, hay ambiente relajado y muffins y brownies de mota y hash, respectivamente.


Éstas son paletas de mota. No las chupamos.


Éste es el Moulin Rouge, donde hay show de strippers y sexo en vivo. No entramos.


Éstas son las famosas chicas de las ventanas. Te hacen señas para que te acerques -pásele marchante, puede ver sin compromiso.


Éste es un churro. En las coffeeshops te venden mota en bolsitas, o te venden churros ya listos para fumar, en estos prácticos tubitos de plástico. No lo fumamos.


De pronto se me ocurrió ponerle mi sombrero a la gente.


El Vondelpark es el parque más grande y popular de Amsterdam.






La exhibición de foto que vimos en el FOAM. Buenísima.




Con nuestros húngaros, Zoli y Moni.


Fuimos a la reunión de CouchSurfing. Todos en el bar eran couchsurfers - hasta el cantinero.
Y sí, los couchsurfers de Amsterdam son unos mamones. Desafortunadamente, tanta demanda se les ha subido a la cabeza. Niños, no pidan couch en Amsterdam. No les van a dar.


Ella es una obra de arte.


El Río Amstel de noche.




El platillo húngaro que nos prepararon. Realmente no recuerdo su nombre.


De postre comimos esto, que aparentemente es una golosina tradicional aquí. Lo de abajo es algo parecido al pan tostado Bimbo. Le pones mantequilla y chispitas.






El súper local se llama Albert Heijn (se pronuncia alberthain). Hay por toda la ciudad. Actualmente tienen una promoción con la que regalan estos gusanos de peluche a los clientes. Los gusanos están por todas partes. Hay naranja, blanco, azul o rojo. Tienen invadida la ciudad.


La gente que tiene (o renta) botes, se da sus paseos por los canales botaneando, echándose su vinito, asoleándose y siendo gente bonita.


En gran parte de Europa se usa la bicicleta - pero Amsterdam está verdaderamente INVADIDA por bicicletas. Y si te descuidas, te atropellan.


Ah, el amor no correspondido...





A la vuelta de la Casa de Ana Frank, se encuentra esta estatua en honor a ella.


Ésta es la oficina de Otto Frank, papá de Ana, en cuya parte de atrás se encuentra el famoso anexo secreto donde se escondieron. El recorrido por la casa realmente da ñáñaras.






Sarah, Aron, Angelous, Mariana. A gusto comiendo queso y tomando vino junto al canal.





Estas XXX son el símbolo de la ciudad. Y no, no significan sexo. En realidad son tres cruces, que los protegían de inundaciones, incendios y la peste. OK, actualmente quizá significan sexo.


Afuera del Museo de Historia Judía, en el barrio judío.


OK people, this Magritte thing is going too far.


El Rijksmuseum es de los más importantes de la ciudad, y es buenísimo. Su colección permanente tiene grandes obras de los grandes maestros holandeses. Además, actualmente tienen una exposición temporal de obras hechas por Miró inspirado en pinturas que él mismo había visto en este museo.





Los mochileros comen mostaza en tubito.




El museo del sexo tiene una enorme colección de objetos de todas las épocas. Este juguete, cuando servía, se movía. Actualmente, hay que usar la imaginación.


El museo está lleno de "sorpresas" que te salen y se mueven como en casa de los sustos. Estas sillas estaban ahí para ver un filme erótico antiguo. Si te sentabas en la de enmedio, un mecanismo se activaba y el asiento comenzaba a dar de brincos, y te violaba, más o menos.
Mariana se salvó. Yo no fui tan afortunado.


Pago por ver.


Una peculiar fuente.

4 comentarios:

  1. Mande con uds!! van a mota free y no lo comen, no la fuman no la toman ni nada, pero si mucho platano jajajaja!

    Y eso de las chicas de vitrina en algun lado lo habia visto, creo que en el NatGeo!!

    Lo que si me da envidia fue que vieron la casa de Ana Frank, si con leer el libro te imaginas todo, la casa, el encierro... ha de ser una sension extraña estar ahi.

    Bueno espero que en lo que restalos traten bien los pesados de alla.!! no manches.. ni en Argentina (que es nadamas mala fama) son asi.

    ResponderEliminar
  2. andaaa pueee.. jaja... no se me antoja ir a sexland y motaland.. jaja... me parece too much... prefiero conservar "algo" de mi ingenuidad en ese sentido :P

    Los quiero, los sigo y los extraño montones!!

    ¿me estan recolectando piedritas?? :P jaja

    ResponderEliminar
  3. Interesante, recién acabo de encontrar el Blog, andaba buscando imágenes en internet, y me lo topé. Me refiero a interesante, a las imágenes, el arte de la ciudad, los bellos paisajes, realmente digno de visitar.
    Con lo que respecta al escrito, en realidad no me sorprende este tipo de situaciones, la morbosidad del ser humano ha llegado a sobrepasar los límites, (si es que alguna vez hubo límites), llegando a ser asqueroso cuando se quiere, o cuando sé es en demasía.
    Soy de Chile, una niña de 16 años (: ¡espero seguir leyendo! Veo que han viajado demasiado, y eso debe ser excitante, Saludos y cariños.

    Camila

    ResponderEliminar
  4. ¿Algún hostal que recomienden en Amsterdam? pienso viajar en un par de meses y agradecería algunos consejos de su parte... Saludos y excelente reseña.

    ResponderEliminar